Cusco y Machu Pichu. Perú. Setiembre de 2019.

 Antes de julio de 2019 ya tenía los pasajes para viajar a Perú en setiembre, y no era con Aerolíneas.

En uno de los foros que visitaba, me contactó una chica de Chile, con la que empezamos a hacer planes para Machu Pichu. Ya había sacado el boleto de ingreso a la Ciudadela, con ascenso al HuaynaPichu,  y si, aunque sea a gatas, lo iba a subir, era mi desafío. Ella llegaba un día después, por lo que cambié mi boleto, y tal vez por agradecimiento, ella confió ciegamente en mi, y en las decisiones que iba tomando en esos meses. Yo visitaba con frecuencia la página de PeruRail, viendo las posibilidades de llegar a Aguas Calientes. Un día vi una oferta de pasajes y  le mando un mje.: Ahora, comprá en tal tren, a tal hora. Asi que cada una desde su casa, compró el boleto en tren desde Ollantaytambo a Aguas Calientes. Más adelante contaré una anécdota.

Entonces, fue el pasaje Asunción-Lima. Lima Cusco, la entrada a Machu Pichu con la Montaña WainaPichu (hay que reservar unos meses antes porque el cupo era 900 personas diarias)  y por último el boleto de tren en Perú Rail, todo a través de la web. 

Un viernes salí de trabajar, piqué algo, me cambié y fui a la terminal. Ya tenía la mochila lista. En Posadas me esperaba mi hijo para acompañarme a Encarnación. En migraciones muestro mi flamante pasaporte, y el hombre se dio cuenta que yo estaba toda orgullosa..jaja.. pueblerina!

De Encarnación a Asunción. Por suerte me toco de compañera de viaje una señora que trabajaba en un proyecto de preservación del yaguareté en Paraguay por lo que nos la pasamos hablando de manchados. legué a medianoche, para ir al aeropuerto de Luque había que bajarse en un cruce. El guarda del cole amablemente hizo señas a un taxi y esperó a que subiera. Pude comunicarme con mi hijo.. que daba vueltas carnero, pensando que me había pasado algo. No sabía que tenia que buscar una Red de Paraguay.. demasiada tecnología.. En el aeropuerto tenía que esperar hasta las 6am. Así que sin quejarme caminaba.. miraba algunas vidrieras.. omm omm. Llegué a Lima no recuerdo a qué hora, y a esperar otras horitas para la combinación. En fin, llegué a Cusco a las 14hs , más de 24 hs después de haber salido de casa. 

Lo digo en serio, cuando viajo, me entrego en cuerpo y alma al transporte público, de otra manera, no podría hacer lo que hago.



Cusco.. a 3000mts de altitud. Tenía la coca que había comprado el año anterior en Humahuaca, mas unas pastillas para el soroche que compré en el aeropuerto. Hablando de coca y aeropuertos.. No tengo mucho cuidado con eso, llevo yerba mate, coca, mas el ajenjo, la cúrcuma y otros yuyos.. Un día voy a aparecer en Alerta Aeropuertos. 

A pesar de lo cansada que estaba, no iba a quedarme en el hotel- Tierra Andina, atendido por gente local, callada y amable-. Cambié dólares a soles y compré el Boleto turístico, que permite el ingreso a varios de los lugares que iba a visitar al día siguiente. Me fui al Mercado Central de San Pedro y comí algo típico: arroz, huevo, palta,. etc etc.. algo así como el silpancho de Bolivia, que nada tiene que ver con nuestros panchos. Mi Dios para remontar esas calles con el soroche y el.. plato típico. Esa noche no encontré la piedra de los 12 ángulos.

Al día siguiente, excursión al Valle Sagrado de los incas, meta te de coca.



Pisac



Ollantaytambo. Me llevó meses pronunciar esa palabra. Me cuesta entender aún, cómo llegaron esas piedras a formar parte del Templo del Sol 









Volvería otra vez en unos días con mi compañera de viaje.



En Chincheros, otro de los pueblos del Valle Sagrado, había una fiesta muy colorida. También entramos a un lugar donde las mujeres tejedoras nos enseñaron los procesos del hilado, la tintura y el tejido de las fibras. No tengo fotos, pero fue uno de los momentos más divertido y lindo que viví.



Al día siguiente salí muy temprano a recorrer el centro histórico. En estas horas se puede apreciar mejor la arquitectura de los templos y las viviendas,  las calles con esas canaletas perfectas y pulcras, las paredes de piedra, ..pero seguía sin encontrar la piedra de los 12 ángulos.



 Las calles de Cusco antes de las 7am.


Iglesia de la Compañía de Jesús. El interior está bañado en oro. 





Plaza de Armas de Cusco. Pachacutec?


Ese mismo día haría otra excursión: Maras y Moray. Las excursiones las había comprado por Despegar. En esta oportunidad, salió todo bien, pero más adelante comentaré que sí tuve problemas en época de pandemia, por lo que nunca más realicé una compra en esa página.




Las salinas de Maras, increíbles.  


Y las zapas de ML usadas.. siguen!



Terrazas agrícolas de Moray. Era un laboratorio incaico! Más adelante escribiré más info. 



Jugando un rato...

Esa tarde llegaría mi compañera de viaje, con la que no había hablado ninguna vez por teléfono, y solo me había mandado una foto.  Mi hijo me dice: "Vos crees que realmente es una mujer?". Una hermana de ella le había dicho lo mismo. ¿Por qué no creer en las personas? ¿Por que no creer que todavía hay personas buenas y sin maldad en el mundo? No seremos más los buenos que los malos? Y ser buenos no significa no tener errores. Ser bueno desde el fondo,  estoy segura que hay más de esas personas.

A la noche fuimos a cenar.. mil vueltas para decidirnos por algo, creo que finalmente fueron hamburguesas... (otra vez de guanaco!.. no lo puedo creer!!) Volvimos al hotel, y me doy cuenta que me había olvidado la mochila, asi que a correr cuesta arriba unas cuantas cuadras! Estaba. Eso pasó unas cuantas veces más, era como que estaba ella y yo me relajaba, y después había que correr!!  Entonces quedó la frase: "Vos creías que venías gratis... no!.

Al día siguiente fuimos a Ollantaytambo (lo escribo sin mirar), recorrimos un poco y fuimos a esperar el tren. Cada una sacó su boleto impreso, ese que había comprado cada una desde su casa- ella en chile, yo en Misiones) en el momento que le indiqué. Y nos preguntamos quién sabe en qué vagón nos tocaría a cada una. 


 
Cuando buscamos el número/letra en los boletos, no lo podíamos creer. 1A y 1B. Entre gritos y risas subimos al primer vagón, alborotadísimas las mujeres. Ahi no más pedimos unas cusqueñas pa´festejar.


El tren de ida era un VistaDome, con los techos vidriados y mesita..re pipí-cucú. Y en primera fila, era un Bonus Track! Nos re divertimos!  
El tren de regreso era más sencillo, y más barato, y fue hasta Cusco. Bien pensado, porque a la vuelta solo queríamos dormir.


https://www.perurail.com/es/





Aguas Calientes: la ciudad a la que hay que llegar y hacer noche para poder ascender el Huayna Pichu en el primer turno del día siguiente. Si, hay turnos para subir. Nosotras teníamos el de las 7am. A las 6am ya hay que estar esperando el bus para llegar a Machu Pichu. Colas larguísimas a esa hora, pero todo muy organizado y rápido.



Amaneciendo en MachuPichu. 


Un poco de vértigo casi llegando a la cumbre. Llevar solo protector solar, algún snack, agua y repelente. todo lo demás puede quedar en bolsas a la entrada de la ciudadela. La mejor época en antes de que comiencen las lluvias de octubre. 



                                                       Y conquistamos la montaña! 2693mts.



 


Si algo podría haber agregado a esta visita, sería un guía para que nos oriente en el recorrido por la ciudadela. A esa altura estábamos cansadas, con calor, y con pocas ganas de pensar.




Una postal que se fijó en la retina.


Mercado de Aguas Calientes: explosión de colores y aromas...Ahí compré un bolso tejido de color marrón, ese que los viernes por la noche sabe pa´dónde rumbear con un vinito.




Pero la visita matutina, el día de emprender mi regreso, al Mercado de San Pedro, me dejó sin aliento- y ya a esa altura estaba bien aclimatada y no sufría el soroche-.. Quería comprar todas las especias, yuyos y otras yerbas que veía. Tomamos unos jugos de frutas tropicales y volvimos al hotel.  
Del regreso, mejor no escribo. Si el ir duró más de 24 horas, no querrán saber cuándo tardé en regresar a casa. ¿Para que??




Perú robó mi corazón. 
La audacia de largarme a comprar un boleto en avión, y de tren, el hotel y las entradas, todo por internet, y programar y pagar las excursiones también usando la Tarjeta de Crédito (que por unos meses quedó en estado incandescente), valió la pena. 
Me quedan mil recuerdos más que no escribí en esta Entrada, para no agotar al lector.
Sé que no hubiera disfrutado lo mismo sin mi compañera de viajes, una mujer casi de mi misma edad, y más valiente aún. A ella le agradezco esos hermosos días comparticos, donde me reí, aprendí, disfruté y lloré. 












 















































Comentarios

Entradas más populares de este blog

Jujuy. Setiembre 2024

Esquel, Chubut. Diciembre 2024

Rio de Janeiro. 2025.

Catamarca. Julio 2024

Misiones. 2023-2024